¿Te has preguntado por qué últimamente los veranos son cada vez más cálidos y los inviernos más fríos?
De acuerdo a los diferentes estudios y mediciones realizadas por la NASA y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, la última década ha sido no solo la más caliente, sino también la de mayor incremento promedio de la misma, con más de 2 °F por encima finales del siglo XIX.
Las estadísticas demuestran que el calentamiento global influye en los cambios extremos de temperatura en diferentes partes del planeta, lo cual genera grandes impactos en los diferentes ecosistemas, lo cual es una realidad intachable. Las mismas están directamente relacionadas con la época moderna, en donde se destaca entre otras cosas el desarrollo industrial.
Desde hace varios años, comunidades científicas, entidades gubernamentales y convenios a nivel mundial (Minamata, Estocolmo, Kioto, Basilea, entre otros) se han creado con el fin de frenar, mitigar e inclusive compensar el daño que el desarrollo humano ha generado sobre los diferentes recursos naturales. Sin embargo, tristemente estos esfuerzos se han visto minimizados debido a la falta de compromiso de los diferentes sectores en todo el mundo.
Las consecuencias se ven reflejadas no solo en la reducción de la biodiversidad en términos de fauna y flora, se ha convertido también en una alerta roja para la salud humana.
Según la OMS(*) las 5 principales causas de muerte en infantes menores a 5 años, son consecuencia de la mala calidad y reducción de acceso a los recursos naturales. Por nombrar algunas: Infecciones respiratorias, enfermedades diarreicas relacionadas con la deshidratación y falta de acceso a agua potable, enfermedades congénitas, entre otras.
El cambio climático no es solo un tema de confort, tiene también componentes económicos y sociales.
Colombia adquirió un compromiso muy importante al suscribir la convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC), a través del protocolo de Kioto, cuyo principal objetivo es la reducción de las emisiones de los Gases Efecto Invernadero (GEI), causantes del cambio climático, por medio de la implementación de Mecanismo de Desarrollo Limpio.
Como individuos también podemos generar cambios en el planeta, reduciendo nuestra huella de carbono con pequeñas acciones como:
Cuidar el agua, evitar usar tu carro diariamente, cuidar tu consumo de energía eléctrica, dale más vida a tus cosas, y lo que ya no funcione en casa, deposítalo donde pueda tener una disposición final correcta.
En la Fundación Puntos Verdes, todo lo que se puede conectar a la corriente o necesita baterías y ya no funciona, no solo se convierte en nuevos artículos y servicios, sino que también ayuda a miles de personas y animales que lo necesitan en Colombia. Anímate a ser parte del cambio.
María Angélica Londoño
